Cómo visitar y qué ver en los restos de Troya (Turquía): horarios, precios

Escenario de La Ilíada, la gran obra de Homero, Troya es una de las ciudades antiguas más conocidas del mundo.

Estuvo habitada durante unos 4.000 años y, por su situación a orillas del Estrecho de los Dardanelos, muestra los primeros contactos entre Anatolia Central y el Mediterráneo.

Por todo ello. en 1998 la Unesco incluyó a Troya en la lista del Patrimonio de la Humanidad.

Cómo visitar las ruinas de Troya en Turquía

Una visita a Troya durante tu viaje a Turquía puede combinarse muy bien con la de los cercanos campos de batalla de Galípoli, escenario de algunas de las más feroces campañas de la I Guerra Mundial.

Así se completa una buena excursión desde Estambul de dos o tres días. siendo el lugar más adecuado para tomar como base para ambas excursiones la ciudad de Çanakkale, la cual se encuentra en el lado asiático de los Dardanelos, igual que Troya.

En Galípoli y Troya se puede iniciar una ruta por la costa del Egeo que pasa por lugares muy interesantes como Pérgamo, Ayvalik, Esmirna, Pamukkale, Afrodisias, Priene, Mileto y el Templo de Dídima antes de llegar a Bodrum.

Todos estos lugares están inscritos en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco o en la lista tentativa.

Qué es y dónde está Troya

El nombre de Troya ocupa un lugar muy importante en la cultura desde hace decenas de siglos, y siempre se ha considerado un lugar especial por sus conexiones con la mitología y la literatura.

Desde la antigüedad todos querían peregrinar a Troya, y así lo hicieron el emperador Jerjes de camino a invadir Grecia, y Alejandro Magno un siglo y medio después en su camino para conquistar Asia.

Julio César y muchos otros siguieron el mismo camino.

Qué ver en Troya en Turquía

Sin embargo, algunos visitantes en la actualidad quedan un poco defraudados tras la visita pues es verdad que los restos no son tan espectaculares como en otros recintos arqueológicos que se encuentran más al sur.

Una de las razones es que la ciudad no quedó abandonada y durante 3.000 años una ciudad se construía encima de los restos de la anterior, destruyendo en buena parte estos.

Además, los arqueólogos no han reconstruidos las principales estructuras, como sí han hecho en Éfeso o Afrodisias, por ejemplo.

En los restos arqueológicos de Troya se han identificado nueve niveles diferentes, la mayoría de los cuales tiene diferentes subestratos y se han documentado al menos 46 de estos.

El más antiguo, Troya I, se remonta a la Edad del Bronce (3000-2500 a.C.) y el último, Troya IX, corresponde a la época romana.

La Troya homérica correspondería a Troya VIIA, la del periodo 1275-1240 a.C.

El descubrimiento de Troya por Schliemann a finales del siglo XIX es uno de los capítulos más atractivos de la historia de la arqueología, pues identificó el lugar tomando como guía La Ilíada, a la que consideraba un documento casi histórico y no sólo una obra de ficción.

El problema es que sus métodos de excavación destruyeron mucha información, ya que en realidad sólo era un arqueólogo aficionado.

Los amantes de la historia y de la literatura encontrarán en la visita de Troya uno de los lugares más apasionantes y llenos de vida de todo el mundo.

Cómo llegar a las ruinas de Troya desde Estambul

Troya se encuentra a unos 25 kilómetros de Çanakkale y hay un servicio de dolmus (minibuses) varias veces al día.

Otra opción, en caso de no tener transporte propio, es contratar una excursión a Troya desde Estambul o desde Çanakkale.

En cualquier caso no recomendamos que sea una excursión de un día desde Estambul porque sería muy pesado si hacemos los desplazamientos de ida y vuelta más la visita todo seguido.

En Çanakkale hay una buena oferta de hoteles, restaurantes y agencias de viajes; en Tevfikiye, en la aldea que hay junto al recinto arqueológico, hay al menos dos pensiones limpias con restaurante.

En cuanto a la duración de la visita del recinto arqueológico de Troya, abría que reservar al menos dos horas, algo más si incluimos el Museo de Troya, que se ha inaugurado en 2018.

Para hacer la visita se puede seguir un itinerario marcado con flechas y paneles explicativos.

A la entrada hay una zona de cafetería, venta de libros y aseos, y también había un pequeño museo cuyos fondos se han trasladado al nuevo museo que se encuentra a unos centenares de metros de distancia del recinto arqueológico.

Reproducción del Caballo de Troya

Lo primero que se encuentra al iniciar la visita es una reproducción de famoso caballo de Troya.

La leyenda dice que fue concebido por Ulises para introducir a un grupo de griegos dentro del recinto de Troya, pero esta escena no aparece en La Ilíada de Homero.

Nadie se resiste a entrar en el caballo y asomarse a las ventanas para que nos hagan una foto desde el exterior.

La entrada al recinto arqueológico de Troya se hace por la Puerta Oriental, a la que se llega por un pasillo entre altos muros.

Se puede subir hasta un bastión de la muralla, desde donde hay buenas vistas de los alrededores, para luego pasar por una parte cubierta por una estructura metálica que protege los restos de muros de ladrillo de la época de Troya II y III.

Una subida conduce a uno de los lugares más importantes de Troya, el Templo greco romano de Atenea, el cual se eleva sobre un bastión de Troya VI.

Fue destruido y reconstruido varias veces, y los romanos arrasaron parte de la acrópolis para hacer un templo adecuado a Atenea Ilias.

Un sendero desciende por el flanco oeste y se pasa junto a los vestigios de las fortificaciones de Troya I.

Paseo por la Troya de La Iliada

En esta parte se hace visible la enorme zanja que excavó Schliemann para acceder rápidamente al nivel que él consideraba que correspondía al de la Troya homérica, que era lo único que le interesaba.

Una de las estructuras más espectaculares es la rampa pavimentada, la cual tiene 21 metros de longitud y siete y medio de anchura, y se sabe que daba acceso a la ciudadela de Troya II.

A la izquierda se ve una zona hundida, que es el lugar en el que Schliemann descubrió lo que él llamó el Tesoro de Príamo.

Este tesoro es muy anterior, se remonta a la época de Troya II, y por tanto no pudo pertenecer al rey de Troya en la época narrada en La Ilíada.

Este tesoro era un conjunto de 1.200 piezas de joyas que Schliemann consiguió llevar a Grecia sin el consentimiento de las autoridades otomanas, las cuales donó al emperador alemán pero desaparecieron cuando las tropas soviéticas entraron en Berlín en 1945.

Durante medio siglo no se supo nada de su paradero, pero en 1991 se descubrió que se encuentra en los depósitos del Museo Pushkin de Moscú.

La rampa conduce a las Puertas Esceas, un lugar que aparece repetidamente en La Ilíada.

Antes de atravesarlas, a la izquierda se ven los restos de un complejo palaciego de la época de Troya VI.

El itinerario sale ahora del recinto amurallado y pasa junto a los restos de un santuario, en el que los arqueólogos han encontrado objetos de culto dedicados a los misterios de Samotracia.

En esta parte baja del recinto se encuentra también el odeón romano, el bouleterión (el lugar donde se reunían los representantes de los ciudadanos que decidían sobre asuntos públicos) y unas termas.

Museo de Troya

A unos centenares de metros de la entrada al recinto arqueológico, a las afueras de la aldea de Tevfikiye, se encuentra el nuevo Museo de Troya.

Aquí se muestran muchas de las piezas que antes guardaban el antiguo museo de Troya en el recinto y en el museo de Çanakkale.

Aquí puedes consultar información actualizada de horarios y precios para visitar el museo de Troya.

Buena parte de los hechos relatados en La Ilíada no suceden en la ciudad de Troya, sino en sus alrededores, por lo que si tienes muy interés y dispones de un poco de tiempo, medio día o un día entero, se puede recorrer esta zona en busca de lugares que recuerden esta epopeya.

Ello además permitiría conocer alguna de las aldeas actuales que se levantan en la zona.

Hay que tener en cuenta que, aunque esta zona está muy poco habitada, el paisaje ha cambiado bastante en los últimos siglos: la línea de costa ha cambiado y el río Escamandro, de importancia en el relato épico, también ha modificado su recorrido.

Nosotros hicimos una excursión de una tarde a pie recorriendo la llanura del Escamandro, camino de la aldea de Yenikoy.

Esta zona de costa es de acantilados, por lo que las casas se encuentran en lo alto y al borde del mar sólo está el puerto.

Siguiendo hacia el sur descubrimos un tramo de costa muy bello, y muy cerca se distinguía la silueta de la isla de Bozcada.

Cómo y dónde ver la tumba de Aquiles en Troya

Nuestro destino era un túmulo que es considerado históricamente la tumba de Aquiles, lugar al que peregrinó Alejandro Magno en su visita a Troya.

En la zona hay un buen número de estos túmulos, y muchos de ellos se atribuyen tradicionalmente a héroes de La Ilíada.

El de Aquiles es fácil de localizar porque se ubica hacia el interior, pero justo frente a un cabo rocoso.

Evidentemente, esta excursión se puede hacer de manera más rápida en coche.

Horarios y precios entradas para visitar Troya

Los horarios para visitar las ruinas de Troya son, de abril a octubre, de 10 a 21 horas, y de noviembre a marzo, de 8,30 a 17,30 horas, con último acceso una hora antes del cierre.

El precio de la entradas para visitar Troya es de 50 liras turcas (5,80 euros).