Cómo visitar y qué ver en Mercado Central de París

Es tan grande el atractivo turístico de la ciudad París que las visitas que puedes hacer en tu viaje van mucho más allá de los monumentos o rincones más tradicionales, como subir a la Torre Eiffel, ver el museo del Louvre o pasear por los Campos Eliseos.

Es más, en uno de los diversos viajes que seguro harás a la capital francesa tienes la oportunidad de hacer una visita muy especial y original, que es una destacada muestra de la vertiente gastronómica de París, el mercado central Rungis.

Efectivamente, hasta que en mi reciente viaje a París tuve la oportunidad de visitarlo, no sabía que el mercado central de alimentos frescos estaba abierto a los turistas, y que además es una visita que está en pleno auge.

Rungis, que es su denominación comercial, ofrece un contundente argumento para generar el interés de los turistas: se trata del mercado de productos frescos más grande del mundo.

Situado a apenas siete kilómetros de París, el mercado central es una pequeña ciudad que ocupa 234 hectáreas, donde las casas y los coches son sustituidos por grandes naves, camiones y furgonetas.

El mercado central de París agrupa a 1.200 empresas, de las que 540 son mayoristas de alimentación, y cada noche en el mismo trabajan más de 12.000 personas.

La mitad de los clientes que cada día acuden al mercado central son comercios minoristas, el 35 por ciento son restaurantes y el resto son cadenas de grandes y medianas superficies.

De la gran actividad que se desarrolla en Rungis te sirve como referencia el dato de que cada noche se registra un promedio de 26.000 entradas a las instalaciones.

Visita mercado central Rungis

Y como te puedes imaginar, la visita del mercado central la deberás hacer por la noche.

Rungis organiza visitas en distintos idiomas, incluído el español, no solo para grupos, sino también para particulares que han viajado a París.

Las visitas para particulares se llevan a cabo el segundo y último viernes de cada mes (en julio y agosto, todos los viernes), mientras para grupos, como fue el caso de mi visita, se organizan a la medida.

Para la visita un autobús de Rungis te recogerá en tu hotel a las 4,30 horas de la madrugada y te trasladará a las instalaciones del mercado central.

Para poder visitarlo te facilitarán una indumentaria especial, una gabardina ligera y un gorro blanco que, tras recorrer el mercado, seguro que concluirás conmigo que más que para que no te manches, dada la gran limpieza de las instalaciones parece que su objetivo es que tu no contamines los alimentos.

De hecho, en la charla inicial antes de hacer la visita te avisan de que en ningún caso puedes tocar los alimentos.

La visita del mercado central se inicia en la nave de los pescados, que es la primera que finaliza su actividad comercial, razón por la que no pude visitarla al empezar nuestra visita algo más tarde.

La siguiente etapa es la visita de la zona de las carnes, donde cada año se negocian 293.000 toneladas.

Las carnes se distribuyen en diferentes naves, desde las dedicadas a la carne vacuna, pollos u otras aves, a las de pollos y la casquería.

Te aviso que esta última es una zona que no a todo el mundo agrada recorrer, pues podrás ver lenguas, tripas y todo tipo de casquería. Eso sí, puede que tengas la oportunidad de ver cómo un carnicero disecciona una cabeza de vaca como si de una show se tratara.

En el vídeo que acompaña este artículo podrás ver una parte de dicho show.

Durante tu paseo podrás ver la gran actividad comercial que hay en este mercado mayorista, y entre las distintas naves te moverás en el autobús de Rungis.

En las naves de los productos lácteos podrás ver los quesos, de los que en el mercado central se comercian más de 400 referencias. Por eso no te debe sorprender de que se trata del mercado de quesos más grande del mundo.

Aquí tendrás una degustación de quesos.

La siguiente visita estará dedicada a la zona de frutas y verduras, la de mayores dimensiones y actividad comercial, con varias naves, 750.000 toneladas al año y 195 empresas, y donde también podrás recorrer la nueva nave dedicada a productos biológicos.

Sin duda será una de las partes más destacadas de tu visita por el gran colorido de las frutas y verduras y su muy cuidada presentación.

Tu visita del mercado central terminará en la nave de venta de flores, cuya actividad en la actualidad es claramente decreciente.

Esto se debe a cómo se desarrolla la comercialización de las flores frescas en todo el mundo gracias a Internet, pues cada día desde los países productores de Sudamérica, como Ecuador o Colombia, y de África, son transportadas en avión a Holanda, desde donde se distribuyen por toda Europa por medio de camiones.

Para completar la visita, la cual te llevará unas tres horas, podrás disfrutar de un excelente desayuno en una brasserie del mercado, el cual te permitirá recuperar fuerzas antes de que te trasladen a tu hotel sobre las 9 de la mañana.

El precio de la visita del mercado central de París es de 80 euros.

Fotos mercado central Rungis París

Aquí tienes más fotos de la visita del mercado central de París.