Qué ver en El Puente del Arzobispo (Toledo): cerámica tradicional

Pocas poblaciones dejan tan claro su origen con el nombre como El Puente del Arzobispo.

Evidentemente, se fundó para proteger el puente que en el siglo XVI hizo construir el arzobispo de Toledo Pedro Tenorio para cruzar el río Tajo.

Con las infraestructuras actuales no podemos entender las dificultades que implicaba hace siglos cruzar una montaña o un río un poco grandes en cualquier desplazamiento.

Curiosidades historia de El Puente del Arzobispo en Toledo

Un puente podía significar la única posibilidad de cruzar con seguridad un río en muchas decenas de kilómetros.

El arzobispo era dueño de unos terrenos junto al Tajo en la zona por donde pasaba la ruta de los peregrinos hacia el monasterio de Guadalupe, en Cáceres.

Estos tenían que cruzar el río en barcas y los accidentes eran frecuentes.

Por eso el arzobispo mandó construir un puente que permitiera el paso del Tajo con seguridad, lo que propició la mejora de comunicaciones entre Ávila y Lisboa ya que propiciaba una ruta más cómoda.

Los beneficios obtenidos por el cobro de derechos de pontazgo debieron de ser bastante altos y justificarían el gasto de la construcción.

De este modo surgió en la orilla una villa que controlaba y protegía el puente con el nombre de Villafranca de la Puente del Arzobispo, el cual con el tiempo el nombre se acortó.

Cómo y dónde ver el Puente del Arzobispo en Toledo

El puente sobre el Tajo es el monumento más destacado de la población.

Se construyó hacia 1380 con ocho arcos, aunque posteriormente, en el siglo XVIII, se alargó con tres más para resistir mejor cualquier crecida.

Hay que destacar que está tan bien construido, que sigue usándose y la carretera pasa por él.

Al no ser muy ancho, se considera una vía de un carril y el tráfico está regulado por semáforos para alternar el sentido del tránsito de los vehículos.

La población se encuentra exclusivamente en la orilla norte del río.

Para verlo, podemos acercarnos paseando por las calles o en coche, pudiendo aparcar justo al otro lado.

Desde las orillas vemos la buena construcción del puente y lo bien elegido del lugar.

Aguas abajo el río se encajona entre barrancos por una zona abrupta donde es difícil trazar un camino confortable para los viajeros.

Aguas arriba el río se ensancha e imposibilita la construcción de un puente.

Si caminamos río abajo por la orilla veremos los restos de antiguos molinos y batanes, anteriores incluso a la fundación del puente.

Desfiladero del Pedroso en El Puente del Arzobispo

Desde el aparcamiento sale un camino que corre paralelo al Tajo y llega, después de recorrer dos kilómetros, hasta el Desfiladero del Pedroso.

Por el discurre, encajonado entre paredes verticales, un pequeño afluente del Tajo, lugar que forma parte del Geoparque Villuercas-Ibores-Jara.

Un detalle interesante es que, durante la primavera y el verano, la zona es un paraíso para los aficionados al avistamiento de aves ya que aquí se concentra la mayor colonia de aviones comunes de la península.

El arco principal del puente está repleto de nidos de estas aves migrantes que pasan aquí los meses cálidos y luego viajan a África para invernar.

Qué ver en la visita de Puente del Arzobispo en Toledo

Pero además del puente, el desarrollo que tuvo desde el siglo XIV ha generado un cierto patrimonio artístico y un casco histórico que bien merece una visita.

Es posible incluir la localidad de El Puente del Arzobispo en una ruta por la provincia de Toledo junto a lugares como Oropesa y la ciudad abandonada de Vascos, además de otros lugares concretos como el Dolmen de Azután.

Un paseo por las calles de El Puente del Arzobispo nos hace descubrir iglesias y casonas repletas de historia.

Plaza Mayor de Puente del Arzobispo en Toledo

El centro monumental se concentra en la plaza Mayor.

A ella se asoman la iglesia de Santa Catalina, el antiguo hospital y el Ayuntamiento.

Te llamará la atención que los bancos de la plaza están adornados con escenas pintadas en azulejos.

Al otro lado de la iglesia se encuentra la casona donde nació el conquistador y colonizador Diego de Villarroel, que fundó en Argentina la ciudad de San Miguel de Tucumán.

Callejeando por El Puente del Arzobispo, constatarás que mantiene un trazado urbano que ha debido de cambiar muy poco a lo largo de los siglos.

Arquitectura tradicional en plaza de Santa Catalina de Puente del Arzobispo

En ese paseo encontrarás bastantes ejemplos de arquitectura tradicional, con soportales y paredes encaladas, y la plaza de Santa Catalina es un buen lugar para ello.

Otro monumento destacado es el Rollo de Justicia, gótico y bastante alto, que se encuentra en la Cañada Real.

Dónde ver y comprar cerámica tradicional en Puente del Arzobispo

En la actualidad la población es famosa por la cerámica tradicional.

De hecho, la Unesco ha incluido en 2019 los procesos artesanales de elaboración de la cerámica de El Puente del Arzobispo y de la cercana Talavera de la Reina en la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Existe un Centro de Interpretación de la Cerámica (c/ Matadero, 6) que informa sobre su historia y su realidad actual.

En él se reproduce un alfar típico de principios del siglo XX con un horno árabe y ofrece una exposición de cerámica de toda España, con especial hincapié en la producida localmente.

Para visitarlo hay que informarse y concertar la cita en el teléfono 925 436 162.

También hay bastantes tiendas y talleres donde se puede adquirir alguna pieza interesante de la famosa alfarería local.

Un detalle curioso es que los artesanos utilizan para sus obras la misma arcilla que los aviones comunes para sus nidos.

Las piezas de cerámica, ya sean de adorno o para su uso, suelen estar decoradas con diferentes escenas.

Las más tradicionales son las escenas de caza, ya que siempre ha sido una actividad muy popular en la zona, y el color predominante es el verde.

Pero también hay artesanos que exploran otros caminos, dibujan escenas diferentes y usan distintos colores.

Qué ver en los alrededores de Puente del Arzobispo en Toledo

Una vez en El Puente del Arzobispo, se puede aprovechar para visitar otros lugares cercanos.

El más conocido es la antigua ciudad de Vascos, que se encuentra en una finca privada y su acceso está restringido, por lo que hay que informarse antes de acercarse.

Cómo y dónde ver el Dolmen de Azután en Puente del Arzobispo

Un punto de interés de acceso libre es el Dolmen de Azután, que se encuentra justo al lado de la carretera CM-4100.

Basta cruzar el puente y seguir menos de tres kilómetros hasta encontrarlo.

Es difícil de ver al conducir ya que está casi escondido bajo una encina y unos almendros.

Hay un pequeño sitio para dejar el coche un centenar de metros antes del dolmen a ambos lados de la carretera.

El Dolmen de Azután es una estructura megalítica de más de 5.000 años de antigüedad que se conserva en bastante buen estado.

Adentrarse en la cámara por el corredor es sumergirse en un tiempo antiguo, aunque los coches pasen a pocos metros.

El lugar estuvo dedicado a enterramientos colectivos y los arqueólogos han encontrado restos de todo tipo que nos hablan de una sociedad remota que se desarrolló, hace milenios, en las riberas del Tajo.

Mapa: cómo llegar a El Puente del Arzobispo en Toledo

El Puente del Arzobispo se encuentra a 117 kilómetros al suroeste de Toledo y a poco menos de dos horas de Madrid.