¿Sabías que el pintor impresionista Henri Matisse hizo dos viajes a Tánger en 1912, y ahí pintó hasta 20 lienzos de la que denominó el paraíso del pintor?
De las obras realizadas en esta ciudad de Marruecos por el que fuera impulsor del fauvismo una de las más famosas es la denominada Ventana a Tánger.
En esta pintura Matisse muestra la vista panorámica desde la habitación donde se alojaba en el hotel Villa de Francia, ahora recientemente reabierto.
Y en dicha vista, además de la kasba, destaca en primer plano la iglesia anglicana de St Andrews, un lugar curioso que vale la pena que visites en tu viaje a Tánger.
Efectivamente, en esta que fuera un gran ciudad internacional, en 1894 se construyó la iglesia de St Andrews en un terreno cedido a la Reina Victoria por el Sultán Moulay Hassan I.
Con anterioridad, en 1661 ya se había construido una primera iglesia cristiana anglicana durante la época de Carlos II de Inglaterra, cuando Tánger fue parte de la dote de la princesa Catalina de Braganza que se casara con dicho rey. Pero dicha iglesia fue destruida cuando los ingleses se marcharon en 1684.
La actual iglesia inglesa de Tánger exteriormente te parecerá una mezquita, con la clásica torre minarete, algo más baja de lo habitual.
Visita iglesia St Andrews en Tánger
Para visitarla debes entrar al jardín situado frente al citado hotel Villa de Francia, muy cerca de la plaza 9 de Abril, acceso principal a la medina de Tánger.
Comprobarás que el jardín en realidad alberga un pequeño cementerio cristiano donde, por curiosidad, debes de fijarte en el grupo de sepulcros de los 13 miembros de una tripulación de un avión canadiense caído en el año 1944.
Para visitar el edificio de la iglesia por dentro puedes avisar al guardián Yassine, quien por una propina te la abrirá y te mostrará la curiosa mezcla de culturas de su interior.
La iglesia anglicana de St Andrews tiene una decoración con claro estilo marroquí, con arcos de herradura que separan las naves laterales de la central.
Te llamarán la atención las decoraciones con estuco y el techo de cedro de la nave y el coro realizadas en su día por artesanos llegados de Fez.
El altar mayor se sitúa en un hueco central que bien podría ser un mihrab, principal rincón sagrado de las mezquitas.
Yassine te mostrará la inscripción en estuco del Padre Nuestro alrededor de la bóveda del coro.
Para completar esa mezcla de culturas, además de los elementos cristianos y musulmanes, podrás ver un par de placas en madera con inscripciones de la religión hebrea.
Por supuesto, en el interior de la iglesia no podía faltar una reproducción del famoso cuadro de Matisse, con la iglesia de St Andrews en primer plano.
En suma, una curiosa visita que te confirmará el carácter históricamente internacional de la ciudad de Tánger.
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