Madrid se abre al impresionismo con “Monet, Obras maestras del Museo Marmottan” de Paris, la primera exposición dedicada al maestro francés que puedes disfrutar en el espacio cultural CentroCentro del Palacio de Cibeles hasta el 25 de febrero.
La muestra permite admirar el verdadero tesoro personal de Monet, con más de 50 obras de su ámbito más privado, a las que más apego tenia y de las que nunca quiso separarse.
Se trata de una completa retrospectiva de Claude Monet raramente expuesta, que nos permite conocer de primera mano su intimidad y, sobre todo, sus fuentes de inspiración, desde sus inicios en la costa normanda, pasando por los viajes a Holanda, Noruega y Londres hasta su obra final, los Nenúfares.
La exposición reúne en un mismo espacio cuadros tradicionales, tecnología inmersiva, fotos y videos para mostrarnos el lado más humano y desconocido del padre del impresionismo y el maestro de la pintura al aire libre.
Para evitar esperas, mejor sacar las entradas con antelación vía online, porque esta muestra va camino de convertirse en la exposición del año.
Toda la información al detalle
Así es la exposición de Monet en CentroCentro de Madrid
La exposición de Monet es un increíble recorrido por las obras más queridas e íntimas del artista, muchas de ellas pintadas cuando ya tenía problemas de visión.
Un recorrido único y exquisito para conocer mejor a Monet y en el que encontraremos muchos de los trucos y colores que utilizaba el pintor francés.
Para entender mejor sus pinceladas y como lograba conseguir la luz, niebla o bruma tan característica de sus cuadros, encontramos varios paneles informativos durante el trayecto que resultan de los más didácticos y entretenidos.
Obras del Museo Marmottan Monet que puedes ver en Madrid
La mayoría de los cuadros de esta muestra forman parte de la herencia directa de Claude Monet, obras que el pintor guardó hasta su muerte en 1926 en su estudio, en la casa familiar de Giverny en la que vivió durante más de 40 años.
Todas las obras expuestas proceden del Museo Marmottan Monet, donde fueron donadas por su hijo pequeño Michel Monet en 1966 y alberga la colección más importante dedicada al pintor.
Una colección fundamental que donó para conmemorar el armisticio de la Segunda Guerra Mundial.
Destacan entre ellas obras maestras y conocidísimas como “Retrato de Michel Monet con gorro de pompón”, “El tren en la nieve”, “La locomotora” o “Londres”.
También encontramos escenas de su estancia en Londres como “El Parlamento. Reflejos en el Támesis‘”, junto con cuadros de gran formato como ‘Nenúfares‘ (1917-1920) y sus ‘Glicinas‘ (1919-1920), tan utilizados en sus numerosos cuadros sobre estas temáticas florales.
Además de esta nutrida selección de pinturas, el espacio CentroCentro, del Ayuntamiento de Madrid, nos muestra también fotografías, videos y diferentes objetos de recuerdo procedentes del museo parisino que nos permiten hacernos una idea más completa de su vida y fuentes de inspiración.
Un recorrido amenizado por música ambientada en la naturaleza que nos sitúa mejor en los escenarios que refleja Monet en sus lienzos centrados especialmente en de su entorno más íntimo, su casa de Giverny.
Pasillo inmersivo en la exposición de Monet
El recorrido está dedicado a la obra del artista en los últimos 30 años durante diferentes etapas de su vida en su país y en sus viajes.
Se articula en seis secciones, que nos sorprenden desde el inicio, con un pasillo inmersivo que nos recibe con sus juegos de luces y pinturas proyectados en paredes, suelos y techos.
Ahí se proyectan algunas de sus más celebres obras, con fragmentos de jardines, estanques llenos de peces o sus nenúfares tan característicos; todo con tecnología digital que te sumerge directamente en el paisaje y en el color de sus cuadros.
“El color, decía Monet, es mi obsesión cotidiana, mi gozo y mi tormento”.
Para situarnos bien, lo primero una biografía completa por años para entender mejor el contexto en el que trabajaba.
Orígenes del Museo Marmottan en la exposición de Monet
La sección primera esta centrada en los orígenes del Museo Marmottan y nos introduce en su vida, en sus amistades artísticas y sus influencias.
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Aquí nos deslumbran “Claude Monet leyendo”, el retrato que le realizó su colega Renoir, junto a pinturas de Rodin, Boudin o Delacroix también pertenecientes a su colección personal.
Llegamos después a las obras más personales de Monet, las que pintó al aire libre, entre ellas “Efecto de nieve, sol poniente”, “Campo de tulipanes en Holanda”, “Paseando cerca de Argenteuil” o “El velero, efecto del atardecer”.
Su decisión de salir del estudio y pintar la naturaleza, rompió con los géneros pictóricos del momento.
Pintar para mostrar la sensación que provoca un paisaje o una escena cotidiana, todo en busca de la luz impresionista, la luz cambiante, que le llevaron a pintar el mismo motivo en diferentes momentos del día y condiciones meteorológicas.
Así es el panel didáctico, el ojo de Monet
En este punto encontrarás un panel didáctico sobre los colores y la luz en los cuadros del artista.
Es “El ojo de Monet”, el ojo impresionista donde podrás comprender mejor como modificaba los colores más sutiles para reflejar las sombras o las variaciones de las diferentes luces del día.
Para ello el artista utilizaba pigmentos sintéticos porque eran más densos que los tradicionales.
Su paleta evolucionó con el tiempo, y es a partir de 1860 cuando abandona el negro y los colores oscuros, y después prescindiría también del amarillo y el verde esmeralda por su poca estabilidad.
En su paleta mezclo más adelante diferentes pigmentos con el blanco superponiéndolos directamente en el lienzo.
Para entenderlo mejor, puedes detenerte en el panel “Los pigmentos de Monet” donde descubrirás cuales eran los colores favoritos del pintor y en que obras los utiliza.
El Jardín de Monet en Giverny
Después del recorrido por las secciones de “La luz impresionista y el Plein air”, nos adentramos de lleno en el jardín de Monet en Giverny.
Allí se instaló en 1883, y fue el lugar donde pudo estudiar la naturaleza y pintar todo su entorno.
La figura humana desaparece, para dar paso a los nenúfares, los iris, los hemerocallis y sus jardines acuáticos, y aquí encontramos las obras de mayores proporciones de Monet.
Especial atención también a su etapa en Londres, donde Monet estudió como pintar la niebla y la bruma de la capital inglesa.
Para lograr estos efectos, Monet tira más de grises y claros y en el cielo utiliza rosado. Destacan aquí “El puente de Charing Cross” o “Londres, el Parlamento, reflejos en el Támesis”.
Sala inmersiva Sueño de Monet
Imprescindible la parada en el “Sueño de Monet”, una nueva sala inmersiva donde nos trasladamos al jardín del artista.
Aquí podrás disfrutar de un video con tomas exclusivas del jardín de Giverny y de todos los rincones florales que inspiraron esta etapa de su obra, especialmente el puente japonés y el estanque de los nenúfares.
A los 70 años Monet tenía ya problemas de visión, solo pintaba cuando había buena luz y debía que protegerse los ojos con un ancho sombrero.
El efecto de sus cataratas se deja notar en los cuadros pintados durante estos años pues ya no pintaba con la misma precisión.
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Su vista mejoró cuando pudo operarse su ojo derecho, aunque no quiso arriesgarse con el ojo izquierdo.
La muestra finaliza con sus obras más abstractas, que le llevaron a convertirse en uno de los influencer de numerosos pintores del siglo XX.
No te pierdas el video final, un documento único en el que impresiona ver a Monet en estado puro, pintando con su paleta en el jardín de Giverny.
Horarios y precios entradas de exposición de Monet en Madrid
Los horarios de visita de la exposición de Monet en CentroCentro de Madrid son, de lunes a domingo, de 10 a 20 horas, con último acceso a las 19 horas.
Los precios de las entradas son, la general, 16 euros, y la reducida, 14 euros, con entrada gratis para niños menores de 12 años.
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