Cómo visitar el Cabo Norte (Noruega) y ver el Sol de Medianoche

Uno de los grandes viajes que puedes hacer por Europa es, sin duda, subir hasta el Cabo Norte, en el norte de Noruega, donde se encuentra el punto más septentrional del continente.

El viaje al Cabo Norte siempre ha tenido un halo de viaje aspiracional que antes mayoritariamente se hacía por carretera. Hace casi 30 años, Escandinavia, y en concreto el Cabo Norte me suscitaba un especial atractivo, sobre todo por ir al lugar más septentrional de Europa y de este modo conocer el curioso fenómeno del sol de medianoche.

Por entonces España aún no era «europea» y hacer un viaje para conocer los países nórdicos era una aspiración para muchos jóvenes españoles.

Así es la experiencia de un viaje al Cabo Norte

Hasta el punto de que cuando tuve la oportunidad de hacer un primer gran viaje por Europa, el destino fue el Cabo Norte, casi un viaje iniciático.

En esa época, un billete de avión era algo casi prohibitivo, por lo que el viaje lo realicé en una furgoneta grande, que permitía transportar todo el equipamiento necesario para el mismo… e incluso dormir en ella cuando era necesario.

La experiencia de viajar al Cabo Norte por entonces era algo parecido a una peregrinación.

Por las largas rectas del norte de Noruega íbamos casi en procesión, sobre todo, furgonetas, autocaravanas y motos procedentes de todos los países de Europa.

Y lo cierto es que por entonces procedentes de España, muy pocos.

En este viaje que hice en el mes de agosto de 1984, con un tiempo lluvioso y desapacible, me encontré el Cabo Norte oculto por la niebla, lo que dificultaba apreciar el sorprendente fenómeno que es el Sol de Medianoche.

Pero aún así los astros fueron favorables y tuve la oportunidad de disfrutar de la visión del gran acantilado en un breve momento en el que la niebla abrió, lo que me permitió disfrutar de dicho fenómeno.

En mayo de 2013 tuve la oportunidad de volver al Cabo Norte y los paisajes y el ambiente que me encontré siguen siendo muy parecidos.

El lema de la oficina de turismo dice que Noruega es un país de cuento.

Y sin duda así lo parece por sus amplios paisajes que combinan montañas nevadas, fiordos y lagos, y en los que apenas encuentras pueblos.

Más bien son agrupaciones de casas de madera, con coloridas fachadas, a orillas del mar.

Son pequeños puertos pesqueros que bajo la luz del sol tienen un increíble encanto.

La nueva experiencia de viajar a finales de mayo me permitió conocer el Cabo Norte y el norte de Noruega justo al principio de la temporada, cuando aún no había afluencia de turistas, pero en una época en la que ya es posible disfrutar del Sol de Medianoche.

Y si bien el tiempo fue excepcionalmente frío (no es ningún problema si vas bien equipado), el contraste entre los paisajes nevados y los días soleados de los que disfrutamos resaltó de forma increíble la belleza de los paisajes y, sobre todo, de los pequeños pueblos.

Eso sí, llamaba la atención la gran variabilidad del tiempo a lo largo del día: nevada, apertura del cielo, sol, y al poco, de nuevo una gran nevada, para terminar con sol.

Pero, sin duda, tuve mucho mejor tiempo en el norte de Noruega que en mi viaje de agosto de 1984 que se caracterizó por las continuas lluvias.

Dónde está y cómo llegar al Cabo Norte

Este carácter aspiracional todavía se refleja en los grupos de motociclistas que llegan hasta este punto, tras un largo recorrido por las carreteras del continente.

Sin embargo, ahora el Cabo Norte es un punto donde recalan los cruceros que discurren por estas aguas de los países nórdicos, y es la forma más habitual de llegar por parte de los turistas.

Para visitar el Cabo Norte, no es imprescindible que lo hagas a bordo de un crucero, pues puedes llegar en un vuelo de la compañía local Wideroe.

Para ello deberás volar desde Oslo a Tromso, y luego coger otro vuelo hasta el aeropuerto de Honningsvag, la pequeña población que hay en la isla donde se ubica este punto geográfico.

Efectivamente, el Cabo Norte se encuentra en una isla a la que antes accedías en tu viaje por carretera a través de un ferry (así lo hice yo en primer viaje hace muchos años).

Ahora no es necesario coger el ferry pues ya hace tiempo que se abrió un túnel de siete kilómetros de longitud que discurre bajo el mar, el cual une gratuitamente el continente con la isla.

Este túnel lo deberás cruzar si, por ejemplo, prefieres tomar el vuelo hasta Hammersfet, la que está considerada como la ciudad más al norte del mundo.

Hammersfet es otra de las etapas habituales de los cruceros, y es una ciudad que que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco por formar parte del Arco Geodésico de Struve.

Qué ver y hacer en la visita del Cabo Norte

En la isla del Cabo Norte lo primero que vas a encontrar es la citada Honningsvag, una muy pequeña población situada al sur de la isla, la cual históricamente se ha convertido en la puerta hacia el Cabo Norte.

Honningsvag, el pueblo del Cabo Norte

Se trata de un pequeño puerto donde recalan barcos de pesca junto con los grandes cruceros, donde también llega el barco correo Hurtigruten que cada día recorre toda la costa del norte de Noruega, y se ha convertido en otra de las formas para viajar por estos parajes.

Otra de sus características son sus casas con coloridas fachadas que reposan sobre la ladera de la montaña y se abren al puerto.

Honningsvag también va a ser el último punto donde te vas a poder alojar y desde ahí también parten excursiones, como la que en lanchas neumáticas te llevan al safari de cangrejos reales.

Desde Honningsvag es donde vas a iniciar tu última etapa para llegar al Cabo Norte.

Por una carretera que sube por la montaña y luego discurre por una planicie, llegarás hasta tu ansiada meta.

Centro de Visitantes del Cabo Norte

Son parajes inhóspitos, que están cubiertos de nieve gran parte del año, y donde se ubica un gran Centro de Visitantes.

Este es un gran edificio que alberga todas las instalaciones necesarios para recibir a los miles de turistas que cada verano se acercan a visitar el Cabo Norte.

Además de un gran restaurante o la típica tienda de souvenirs, hay un cine con pantalla de gran formato donde de forma continua se proyecta gratis una excelente película que te aconsejo no te pierdas.

Es un muy instructivo documental que te muestra el ambiente y la vida del Cabo Norte durante las distintas épocas del año.

Frente al edificio del Centro de Visitantes se encuentra la famosa escultura de hierro que representa el globo terráqueo, la imagen icono del Cabo Norte.

Es un paraje sobre un elevado acantilado, sobre el que a veces la niebla cae y no deja ver el horizonte.

Allí te explicarán que ese punto no es exactamente el más septentrional de Europa.

En realidad este punto geográfico se corresponde con una cercana punta de tierra que entra en el mar y que, evidentemente, no tiene el encanto para convertirse en la citada imagen icono.

Sin duda, el momento ideal para hacer esta visita en primavera y verano es cuando, según el reloj, cae la noche.

Es entonces cuando, si tienes suerte con un día despejado, podrás ver el enigmático sol de medianoche, el que nunca se pone durante esta época del año en estos parajes tan al norte.

En cualquier caso, aunque no puedas ver el sol de medianoche, la claridad te ocultará la sensación de que es de noche.

Cómo es el Sol de Medianoche y cómo verlo en el Cabo Norte

Respecto al curioso fenómeno del Sol de Medianoche, no terminas de acostumbrarte a que durante las horas ¿nocturnas? no solo hubiera una claridad casi como durante el día, sino que incluso se vea la luz del sol.

En mi caso, no tuve ningún problema para dormir; es más, lo hacía con las cortinas de la ventana abiertas.

Actividades y excursiones en Cabo Norte

En tu visita a la isla del Cabo Norte, también puedes hacer algunas actividades turísticas, típicas de la zona.

Así, en el muy pequeño pueblo pesquero de Gesvaer puedes hacer una excursión en barco a la isla de los Pájaros, donde podrás disfrutar de la gran riqueza ornitológica de la zona.

O desde la antes citada Honningsvag puedes hacer otra excursión en lancha neumática para participar en un safari del cangrejo real.

Además de pescar este enorme cangrejo característico de la zona, desembarcarás y en una típica tienda de los samis donde degustarás los cangrejos capturados.

Mi conclusión es que el Cabo Norte mantiene el encanto y el atractivo que me llevó hace casi 30 años a cruzar Europa en una furgoneta para terminar frente al mítico acantilado.

Ir al norte de Noruega sigue siendo un viaje aspiracional con el premio final de poder ver el Sol de Medianoche.

Mejores Fotos del Cabo Norte

Aquí tienes más fotos del Cabo Norte, uno de los viajes “aspiracionales” que puedes hacer en Noruega.