Qué ver en Alcudia (Mallorca), de Pollentia a la ciudad medieval

Mallorca es una isla repleta de lugares interesantes, tantos que resulta prácticamente imposible conocerlos todos en un solo viaje a este rincón de las Baleares.

Tengo que decir que, entre los lugares visitados en mi último viaje, mi gran descubrimiento ha sido Alcudia, y digo descubrimiento porque no era consciente de su atractivo.

Es probable que la imagen de la playa de Alcudia, un estupendo arenal rodeado de hoteles y apartamentos, me hubiera confundido.

Esta playa es un excelente lugar de descanso y disfrute, pero no es lo que solemos considerar un lugar a visitar.

Sin embargo, a sólo dos kilómetros hacia el interior encontramos el casco histórico de Alcudia muy bien protegido por sus murallas medievales.

Dónde aparcar en Alcudia

Y ya podemos asegurar que Alcudia es uno de los destinos a tener en cuenta en un viaje de turismo por la isla de Mallorca, sobre todo si estamos considerando una gran vuelta a la isla, ya sea con nuestro propio vehículo o con un coche alquilado al llegar.

Si venimos en coche, nos conviene saber que justo al lado de las murallas, junto a la iglesia de San Jaime, encontramos un gran aparcamiento público.

Hay otros cerca de la ciudad amurallada, pero éste es el más conveniente.

Curiosidades historia de Alcudia

Además, muy cerca se encuentra la oficina de turismo y la parada de taxis, así que podemos considerar que es un buen lugar para iniciar un recorrido por el casco histórico de Alcudia.

También junto al aparcamiento encontramos la entrada al recinto arqueológico de Pollentia, los restos de la ciudad romana más importante de Mallorca.

Estos restos tan bien conservados son visibles ya que la Alcudia medieval se levantó justo al lado pero no encima de la ciudad romana.

Por otra parte, el propio nombre de Alcudia nos hace pensar que en este lugar también debió de existir una población en la época musulmana, así que esta zona ha estado habitada en diferentes momentos de la historia.

La predilección de tantas culturas por este emplazamiento se explica en buena medida por la geografía.

Alcudia se encuentra en el istmo de la pequeña península que termina en el Cabo del Pinar.

Esta península separa la Bahía de Pollensa de la de Alcudia, por lo que siempre ha sido un lugar apropiado para una población desde donde se podría controlar toda la zona.

Podemos recordar que la palabra alcudia, de origen árabe, hace referencia a una altura o promontorio.

La Alcudia medieval surge a partir del siglo XIII, tras la incorporación por Jaume I de la isla a la Corona de Aragón. El rey conquistador dividió la isla en ocho partes, quedándose cuatro para él.

Las bahías eran lugares vulnerables ante el ataque de pirata, por lo que en el siglo XIV se decidió proteger a la población con una muralla. Ésta llegó a tener 26 torres en sus dos kilómetros de perímetro.

Aunque en el siglo XIX se derribó una parte para favorecer el crecimiento de la ciudad, todavía se conserva una buena parte.

La muralla tenía tres puertas principales y algunos portillos menores.

En el siglo XVI, Alcudia jugó un papel importante durante la Guerra de las Germanías.

Aquí se refugiaron los nobles mallorquines, partidarios del rey Carlos I, cuando los agermanados dominaron toda la isla durante unos pocos años.

Esta fidelidad al rey le valió grandes privilegios en tiempos posteriores.

Lo mejor que ver y hacer en la visita de Alcudia

La prosperidad de esos tiempos está reflejada en el esplendor de algunos edificios que vamos a encontrar en nuestro paseo, ya sea la iglesia de Sant Jaume y una serie de mansiones señoriales.

La primera visión que podemos tener de las murallas almenadas y las palmeras que crecen delante es muy atractiva.

Iglesia de Sant Jaume en Alcudia

Mirando a la izquierda veremos la mole de la citada iglesia de Sant Jaume, que realmente forma parte de la muralla. Puede ser el comienzo de nuestra visita.

Aunque la iglesia original era de estilo gótico y de la misma época que las murallas, hace unos 150 años se hundió totalmente.

Lo que vemos ahora es una reconstrucción, imitando dicho estilo gótico.

Uno de los detalles que más destacan es el gran rosetón de la fachada principal a través del cual se ilumina el interior.

A partir de aquí, lo mejor que se puede hacer es pasear tranquilamente dejándose sorprender por los rincones que vayamos descubriendo al azar; hay algunos edificios concretos de interés, pero seguro que los encontraremos si callejeamos un rato.

Casas señoriales en Alcudia

En este paseo veremos que se combinan las grandes mansiones con casas mucho más modestas.

Pero al estar todo tan bien cuidado, el conjunto resulta muy armonioso y atractivo.

Hay que destacar algunas de estas casonas señoriales, como Ca’n Canta, en el carrer Major, y donde hay que fijarse en las ventanas finamente labradas.

En cambio, Ca’n Domenech, en el carrer dels Albellons, tiene la fachada sin decoración.

En el carrer d’en Serra encontramos Ca’n Fondo y Ca’n Torró, una al lado de la otra, y de hecho comparten el patio.

Hay que destacar que en esta última se encuentra la biblioteca municipal y es de libre acceso. Sólo cierra los lunes y las tardes del fin de semana.

Seguro que en algún momento también pasamos por la Casa Consistorial, al final del carrer Major.

Muy cerca, por la plaza de la Constitución ya veremos varios restaurantes y cafeterías con las terrazas puestas en la calle.

A medida que vamos callejeando veremos que desaparecen las casas señoriales y los locales comerciales y el ambiente es mucho más tranquilo.

Y de vez en cuando encontraremos casas antiguas reconvertidas en pequeños hoteles muy atractivos.

Puertas monumentales en la muralla de Alcudia

Según para donde caminemos, llegaremos a la Porta del Moll o a la Porta de Mallorca, las dos puertas monumentales que se conservan de la muralla.

La parte de la muralla donde hemos comenzado la visita sólo se puede admirar desde abajo, pero en la zona norte del recinto amurallado es posible acceder a la parte superior.

Es un paseo muy agradable recorrer un buen tramo de la muralla y llegar a varios torreones disfrutando de la visión de algunas calles del casco antiguo y de una buena vista de los alrededores.

Desde este paseo es posible observar los restos de la muralla renacentista que se levantó alrededor de la medieval.

Aprovechando parte de un baluarte de esta muralla se construyó en el siglo XIX una plaza de toros.

Yacimiento romano de Pollentia

Si volvemos al lugar de inicio del recorrido, veremos, como ya se ha dicho antes, que justo al lado del aparcamiento se encuentra el yacimiento de Pollentia, que fue la ciudad romana más importante de las islas Baleares.

Se piensa que Pollentia se fundó en el año 70 A.C. y que vivió un par de siglos de un cierto esplendor ya que la extensión que ocupaba fue considerable.

Se observa perfectamente el trazado de las calles de la zona residencial, con algunas casas bien conservadas, y parte del foro.

Justo al lado de la iglesia de Sant Jaume, en el interior del casco histórico, el pequeño Museu Monogràfic de Pol-lèntia exhibe muchas piezas halladas en el yacimiento.

La misma entrada sirve para ambos lugares.

Si se tiene tiempo, se puede avanzar unos 500 metros en dirección hacia Port d’Alcudia y buscar el teatro romano que fue excavado en la roca aprovechando un desnivel del terreno.

Mapa: cómo llegar a Alcudia en Mallorca

Alcudia se encuentra al noreste de la isla de Mallorca, a 46 minutos de la capital Palma.