Si haces un viaje a cualquiera de las comunidades del Cantábrico, ya tienes asumido que puede llover. Y más si el viaje lo haces en invierno. Pero eso no es óbice para que no mantengan un encanto muy especial.
En uno de mis últimos viajes a Asturias, la visita de Gijón coincidió durante un clásico día invernal, muy cerrado y con persistente lluvia. Esto ha tenido la ventaja de disfrutar de otra visión en el paseo por el histórico barrio de Cimavilla.
A la hora de planificar tu viaje, te aconsejamos que lleves un seguro de viajes adecuado que te pueda evitar complicaciones en caso de una incidencia, y reserves con antelación el alojamiento según tus preferencias, así como el coche de alquiler y también las excursiones y actividades que te van apetecer hacer
Este paseo incluye Campo Valdés, plaza donde este barrio del Gijón histórico confluye la playa de San Lorenzo, y donde se encuentran el palacio de los Valdés, las termas romanas y la iglesia de San Pedro-
También el Cerro de Santa Catalina, parque cuyo punto más emblemático es el Elogio del Horizonte, gran escultura realizada por realizada por Eduardo Chillida.
En el paseo por las calles peatonalizadas de Cimavilla puedes ver varios edificios históricos de piedra que adquieren un brillo especial en un día de lluvia.
Ese es el caso del museo Casa Natal de Jovellanos o la Capilla de los Remedios, ambos del siglo XV. O la típica casa de piedra utilizada por los pescadores que tradicionalmente han habitado este barrio.
Y, por supuesto, pasearás por la plaza del Marqués, ya frente al antiguo puerto de pesca, que ahora alberga barcos de recreo.
Allí tienes el imponente palacio Revillagigedo, del siglo XVIII, que en la actualidad alberga un centro cultural, y la estatua monumento a Pelayo, que incluso en un día de lluvia conforman un conjunto monumental muy destacable.
Fotos de Cimavilla en Gijón
Como anticipo a la crónica del paseo por Cimavilla, a continuación tienes esta galería de fotos del Gijón histórico en invierno.
preciosas fotos 🙂