Cuando termines la visita de la Ciudad Prohibida, en Pekín Beijing, si haces el recorrido más habitual, que es entrar por la plaza de Tiananmen, a la salida por la puerta norte te encontrarás con la colina artificial del Parque Jingshan.
Eso me sucedió en mi viaje a China, pero no sabía que muy cerca se encontraba uno de los parques más bellos de la capital china, el Parque Beihai.
Así lo ha apuntado la lectora Abarciela, en los comentarios del tema dedicado a mis 5 visitas imprescindibles en Pekín Beijing, pues considera que dicho Parque Beihai debe ser también una visita imprescindible.
El Parque Beihai lo encontrarás al oeste del Palacio Imperial, más conocido como la Ciudad Prohibida. Sus jardines se remontan a más de mil años, y se trata de un parque muy céntrico que está considerado como uno de los jardines imperiales mejor conservados de China.
Estos antiguos jardines imperiales se abrieron a la visita del público en 1935, y con 70 hectáreas de extensión, el Parque Beihai está ocupado en mayor parte por lagos.
En el paseo por el parque se encuentran varios palacios imperiales y pagodas.
En el sur del parque se encuentra su zona más destacada, que es la denominada Ciudad Redonda, una construcción rodeada por un muro que se remonta al siglo XII. Dentro de la misma se puede ver un gran Buda de jade, de metro y medio de altura.
En lo alto de la colina del Parque Beihai se sitúa la denominada Pagoda Blanca, cosntruida a finales del siglo XVII. De 36 metros de altura, desde la que tienes una vistas panorámicas de la Ciudad Prohibida.
Para visitar el Parque Beihai deberás pagar 15 yuanes (2010), y también deberás pagar para entrar en la Ciudad Redonda (2 yuanes) y la Pagoda Blanca (10 yuanes).
Si quieres llegar en autobús al Parque Beihai, las líneas 5, 101, 103 y 10o te dejarán en la puerta principal.
Para completar la información, en este enlace puedes leer la experiencia de Antonio en su visita del Parque Beihai en Beijing.
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